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▶ Cuento Navideño Improvisado

13/12/2010

Cuento Navideño impulsado por  Anne Notre infant Terrible

▶ Volando en círculo desde el círculo Polar Ártico llegué hasta aquel reinado desconocido y hostil, buscando sino un claro, un lugar donde poder reposar y comer caliente. Mi abuelo me dijo que virara en cuanto divisara el humo gris de la cabaña más allá de las cordilleras escandinavas.

Los renos nos reuníamos en el bosque de Forest desde hacía milenios.

Tras un aterrizaje forzoso, tres vueltas de campana y dos volteretas, llegué a mi destino. Dicho de otro modo, no muy lejos de mi destino, a un par de valles de distancia.

Después de tanto vuelo, el cansancio hizo mella y caí, rendido sin remedio, en una helada ensoñación, A la par de los acontecimientos, decidí camuflarme entre el ramaje de un abetal. Me dormí como un bebé, como un bebé digo, como un tronco entre hermanos; las fauces oscuras de la noche me engulleron sin cuartel. A las puertas del alba me alertó un ruido, al abrir los ojos el destello del paisaje nevado me golpeó en medio del hocico. Atónito y deslumbrado, sacudí la cornamenta para deshacerme de la nieve. Motivando una micro tempestad a mi alrededor.

Tras agazaparme creí reconocer a otro reno perdido. Dos tontos en apuros; pensé con afortunado acierto.

Disculpa, dije en alto, ¿Acaso sabes dónde vas por aquí? Tras la reacción causada por la sorpresa, medio recuperado y sostenido a duras penas por las cuatro patas temblorosas, como si de un animal indefenso se tratara, cuando lo acostumbrado en nuestra raza es caminar erguidos y conducidos por las pezuñas traseras con tacón cubano; el camarada me miró con los ojos redondos como esferas negras brillantes de excitación y una jeta con el morro boquiabierto.

El muy capullo; de pronto da un brinco y desaparece saltando entre la maleza cubierta por la nieve.

Estúpido animal ignorante, cagón antipático. Además de tío raro.

Cuando retomé el trote me olvidé del incidente y la alegría me acompañó durante el camino.

Apenas demoré en olfatear la cabaña, y en cuestión de menos de una hora, tras atravesar dos gélidos ríos y un lago helado me adentré en el bosque de Forest.

Las campanillas de la puerta me dieron la bienvenida, después mis amigos renos me agasajaron con sus bromas y me invitaron a beber cerveza.

La taberna estaba a rebosar, se respiraba camaradería y un calor bestial. A través de los altavoces sonaban los mejores villancicos de todos los tiempos.

Nuestra raza también suele ataviarse con prendas superiores, tales como la cazadora, de cuero o tejana, decorada con chapas de la Cocacola o Colacao. Algunos de nuestros mejores ejemplares presumen de llevar el pellejo tatuado con temas navideños, cascabeles en las cejas, o aros dorados en el hocico. El pelo de la cabeza engominado y los cuernos trenzados por lucecitas de colores.

Son los viejos del lugar, los más auténticos, los primeros, los Renos de Santa. Hoy aquí, con nosotros, porque éstos héroes olvidados tienen algo que decir. Estos animales que tanta alegría repartieron durante dos guerras mundiales, éxodos, exterminios, pandemias y hambrunas, que trasladaron juguetes en noches de tormenta, con nevadas colosales, cruzando océanos y desiertos, y que nunca nada les detuvo.

Renos que dedicaron su vida a los niños, que con sus proezas, lograron que los regalos llegaran muy lejos, que se la jugaron en cada rotonda cósmica, en cada cruce galáctico, siempre a velocidades supersónicas. África, Latinoamérica, Asia, Europa, no hay continente ni océano que se les resistiera.

Había llegado el momento de suceder a estos héroes, de darles el descanso merecido. Y también había llegado el momento de animar a sus relevos, a nuestros nuevos representantes, las jóvenes generaciones de renos navideños.

Y ahora, de repente, los humanos inventan la crisis y el fenómeno trasciende como un rápido efecto mariposa.

Para recuperar el estatus social que nos pertenecía por la gracia de la Divina Banca Humana, los renos de más de 1000 años deberán aplazar la edad de jubilación a 1100.

La cognición racional humana no puede ser más limitada. Pues de no remediar el asunto y hallar una segunda solución, los renos estaremos condenados a desaparecer.

Se originó un diálogo alrededor de la mesa más abarrotada.

Dicen que el sacrificio valdrá la pena a largo plazo.

Dicen esto, dicen lo otro, palabras sin valor, sólo la ausencia de codicia podría salvarnos.

Pero, ¿Y nosotros? Pregunté con miedo a que alguien conociese la respuesta.

Si vosotros continuáis trabajando otros cien años,  ¿Qué será de nosotros, de qué viviremos, que fantasía nos mantendrá, que imaginación nos alimentará? ¿Con quién soñaran los niños?

Es la ley de los hombres y estamos subyugados a ella.

Los niños soñarán con remos asmáticos, auxiliados por lentes, con bastones y sufriendo reumatismo, repartiendo gripes o sufriendo hipotermias. ¿Qué pasará con Santa? El es un mito eterno, pero nosotros no. ¿Cómo haremos para que llegué a todos los rincones de la tierra en una sola noche?

Acudamos a la fundación de renos navideños olvidados. Gritó un reno, intentando levantar los ánimos con la broma.

Ninguno rió.

Uno de los renos más viejos, enorme y con aspecto de haber combatido en mil Navidades, además de barrigón y borracho, golpeó la mesa con fuerza y gruñó en voz alta,

Lo volveremos hacer. Pero esta vez no lo haremos por los hombres y mujeres de la tierra, lo haremos por las niñas y los niños. Por ellos, benditos inocentes; la Navidad les pertenece.

Por los niños, gritaron desde el fondo, esos pequeños cabroncetes. Por los niños, replicaron al unísono con los vasos espumosos en alto.

La música sonó alegre y volvimos a bailar y a beber. Engrasando los aparejos para dejarlos listos para la gran noche.

27 comentarios leave one →
  1. 22/12/2010 15:22

    Gracias por la propuesta MX, tenemos el deber de dignificar a esos animales maltratados por la historia y el cine. Estoy contigo.
    Gracias también por tus deseos y tu visita. Estás en tu casa, ya sabes.

    Meri krismas
    i molta Salut

  2. 22/12/2010 14:41

    Buenísimo Eduard, te quedó excelente la voz del reno. Una de las soluciones podría haber sido establecer un sistema previsional de jubilación para los renos… no, mejor no, creo que deben retirarse con algo más de dignidad.
    Saludos desde el cálido, infernal, cono sur.
    Buena suerte y más que suerte!

  3. 19/12/2010 19:36

    ¿Qué es vivir sino una larga improvisación? Imagina que al nacer llegáramos con el librito de instrucciones bajo el brazo. Sería genial, ¿No? Qué hacer cada vez que uno se encuentra en problemas, deprimido, o jodido, no importa de que. Página 104, tómese un copazo de coñac y salga con sus amigos. Página 499, Invítela a salir. Página 985 lea un libro, etc.

    Ten unas Buenas Fiestas y mejores Navidades.

  4. 19/12/2010 19:16

    Carajo, improvisas mejor que Coltrane y Parker juntos!!!

    Un gran abrazo vuela a través del Atlántico, eduard. Lo mejor para ti y tus renos!

  5. 19/12/2010 17:38

    JLin, mejoro como el buen vino, pero sólo aparentemente, lo que hago es rodearme de los blogeros más auténticos que me escriben condescendientes comentarios sobre mis cuentos de tres cuartos.

    Bones Festes i sort amb el AVE

  6. 19/12/2010 17:29

    Chrieseli, muchas gracias por pasarte por aquí, que desde allí ya te pilla bien lejos. Gracias por acordarte y desearte igualmente unas buenas fiestas Navideñas.

    G. Como diríamos, contra más conozco a los hombres, más me gustan los renos.
    Gracias por tu amable visita. Que tengas unas Buenas Fiestas.

    Ana. Muchos renos y demás seres del mundo animal deberían celebrar la Navidad también, al fin y al cabo es una oda a la vida.

    Y El hombre quiere ser pescado y pájaro,
    la serpiente quisiera tener alas,
    el perro es un león desorientado,
    el ingeniero quiere ser poeta,
    la mosca estudia para golondrina,
    el poeta trata de imitar la mosca,
    pero el gato
    quiere ser sólo gato
    y todo gato es gato
    desde bigote a cola,
    desde presentimiento a rata viva,
    desde la noche hasta sus ojos de oro

    PD Neruda.

  7. 18/12/2010 12:15

    Mejora usted con el tiempo amigo Eduard y no deja de sorprender y maravillar con sus cuentos y relatos; bones festes a vosté també desde València.

  8. 17/12/2010 22:08

    Me gusta cómo le has dado una personalidad a los renos, llena de chispa y autenticidad. Todo un cuento de navidad!!!

  9. 17/12/2010 21:21

    bien por estos renos con mas conciencia que mucha gente que conozco.
    abrazo y feliz 2011.

  10. 17/12/2010 15:10

    Inesperado y altamante creativo. Qué más se podía esperar de Eduard Blanco, único, grande y nuestro.
    En el fondo mi querido amigo, sé que eres un dulce XD
    Un abrazo apretado desde este lado del planeta y muchas felicidades para ti y tu familia en esta Navidad.
    Con el cariño de siempre

  11. 17/12/2010 13:37

    Dudo que seas asquerosa, lo de mentirosa no puedo asegurarlo, pero diciendo que te gusta como escribo, no creo que sea muy mentirosa, mentirosilla, en todo caso, pero nada del otro mundo.
    De todos modos tu comentario dual me ha llenado de grata sorpresa, primero por tus palabras respecto a los renos, esos viejos colegas, dices que te gustó mucho; otra prueba de que no eres mentirosa, pues demuestras tener un gusto impecable.
    Y lo de la improvisación, que por serlo, hasta aproveché el título/explicación.
    Eres la primera persona que hace referencia al hecho.
    Y hablando de improvisar, la que tu haces espontáneamente, es la segunda respuesta o comentario, que me llena de gratitud por tu tan amable visita.

    LoCoDaTaR

  12. La curiosa permalink
    17/12/2010 7:12

    Soy una asquerosa mentirosa..jeje ya pasé por este blog…por el relato del orfanato africano…Tu estilo me recordaba a alguien por eso me fijé un poco de lo que habías escrito anteriormente y ahí me di cuenta de que si había leído por acá… 😛 jeje en fin…me gusta como escribis Eduard…
    Saluditos…

  13. La curiosa permalink
    17/12/2010 7:05

    Primera vez que paso por acá. Y paso por recomendación de Piper a ver el cuento navideño. Me siento un bicho raro por no tener un blog…jejej
    En fin…Me gustó mucho el cuento. Jamás me había puesto en el lugar de un reno..! Jeje creo que éstos estan subestimados. Abajo papá noel(Santa, san nicolas, etc) y arriba los renos..!jeje
    Una de las cosas que más me sorprendió de esto es que fue improvisado. Sin palabras…
    Muchos saludos…
    Lari.

  14. Concha Huerta permalink
    16/12/2010 11:02

    Espero que tus renos añejos puedan iniciar sus recorrido sin problemas. Lo digo por los controladores. Muy divertido este cuento-fabula en que tocas todos los temas candentes a traves de los ojos de este reno despistado. Un alter ego? Que buena idea de Anne. Espero que se apunten muchos al reto de la navidad. Ya tenemos relato de te Ruben y acabo de publicar el mio. Saludos y feliz navidad

  15. 15/12/2010 22:37

    Un cuento infantil con unas pinceladas de adulta reivindicación. Buena historia para contar a los niños faltos de cuentos y sobrados de realidades.
    Salut
    PD: me gustaba Morente, creo que fue un señor que entendió a la perfeccion lo del mestizaje y que todo puede ser compartido si se hace de corazón.

  16. 15/12/2010 19:20

    Vaya, descubro otra faceta tuya en este cuento, y encima me gusta lo encontrado. Esa visión de los renos que se comportan como humanos son toda una delicia y es cierto que nos hace revivir lo que afortunadamente aún nis queda de niños a cada uno. Gracias por ello.

    Yo también me duelo por Enrique Morente, aún recuerdo aquella actuaciçpon suya en el Juan Evangelista de Madrid cuando cantó aquello de «Pa ese coche fúnebre no me quito yo el sombrero» por Carrero Blanco. Mis condolencias a vosotros.

    Un fuerte abrazo .

  17. 15/12/2010 9:18

    Sabía que terminarías por Volver Piper, como dice la canción, vuelve por Navidad, pues recargada de pilas y demás combinaciones energéticas, espero que todo te vaya mejor que nunca.

    PD Lo de Morente nos pilla algo lejos, pero como las relaciones más cercanas son de mi Santa, cuyo padre, en paz esté, se dedicaba, conoce a todos los maestros del cante y cada vez que ocurre algo, aquí se vive como un drama para el mundo del flamenco.

    Abraçada i Salut

  18. pipermenta permalink
    14/12/2010 22:12

    Mi querido Eduard, sello Eduard. Más no se puede decir. Perdón por entrar de esta manera y no ser más educada preguntando como va todo y esas cosas.
    Por lo que ya me comentaste en una ocasión sé lo que te afecta a ti y a tu mujer. Mis condolencias por vosotros y todos los que sentimos el flamenco como algo muy especial.
    El cuento es muy tuyo, con su chispita de critica social y todo aquello que te inquieta, si además de eso es capaz de entretener a una niña de seis años, cumple todos los requisitos que necesita un cuento.
    Mi cuento ya esta listo pues las sugerencias de Anne son ordenes a cumplir y con verdadero gusto. En cuanto pueda lo cuelgo. Raro, raro, como yo misma.
    Un placer volver y encontrar que los amigos siguen siendo los de siempre.
    Un abrazo.

  19. 14/12/2010 21:03

    Ay, Edu, no lo conocía, pero lo siento mucho por ti. De verdad. Especialmente por las circunstancias en las que parece habernos dejado. A pesar de que la verdad es que es imposible matarnos (y menos a los artistas), sí nos perdemos los unos a los otros por muchos años a veces siglos y milenios, cuando los cuerpos mueren… hasta que nos volvemos a encontrar. Siempre nos volvemos a encontrar. Un abrazo para Laura y otro para tí, corazón de melón.

  20. 14/12/2010 20:30

    ¿Qué hay más bonito que la progresión lineal de la conducta, de la interactuación entre nosotros? ¿Que empezando por un deseo distraído de Anne termine al otro lado del mundo en la imaginación viva de una niña??
    No imaginé que el cuento que escribí a salto de mata llegara tan lejos

    PD Estamos de luto en casa, Enrique Morente murió, Somos del flamenco aquí. Mi mujer, toda su familia. En fin.

  21. 14/12/2010 20:22

    Me encantan los renos viejos, mezcla de veteranos de guerra y «harlistas», como les llaman aquí a los varones en chaqueta de cuero y anteojos negros (y coleta) que participan en caravanas de Harley-Davidsons. 🙂 El detalle de los tatuajes con motivos navideños es insuperable!!!

  22. 14/12/2010 20:20

    Se la leí a mi hija (de 6), adaptando algunos términos (soy muy buena en traducción simultánea), y luego de pasado el shock de ver a «Santa que se volvió malo» y la explicación correspondiente, escuchó la historia con gran interés, pidiéndome algunas explicaciones entremedio…. al final aplaudió. Me dijo que le había gustado mucho, con una sonrisa que te dejo aquí, de premio. Ahora da vueltas por ahí disfrazada de reno, con un peine y un cepillo de dientes a modo de cuernos en la cabeza y una capa verde y roja con cascabeles sonando a cada brinquito. 😀

  23. 14/12/2010 20:03

    Yo con el despiste y el sueño atrasado de varias noches empiezo a leer -un poco en automático, para qué lo voy a negar– lo primero que pienso es «ya vino este loco otra vez a poner esa horripilante «foto» de Santa, igual que el año pasado, no puede ser!!!» pero leo y leo y no se me parece a Anne. Y pienso, «pero está muy lindo este cuento, es inesperado, me encanta». Y sigo, y sigo, pero no me da Anne por ningún lado… Me tropiezo con la primera «malapalabra» que suelta el reno sobre el compañero estúpido y cobarde y pienso «Pero no, es que no puede ser de Anne!» Y en ésas me paso hasta el final del delicioso cuento…. porque había leído al principio «Por Anne» y como no sería la primera vez que el dueño de casa publica y republica las improvisaciones de Anne sus, pues eso fue lo que despistadamente entendí.

    Ahora, lo interesante del asunto –para mí– es que jamás de los jamases se me pasó por la mente que este cuento provenía del teclado Eduardiano. Te desconocí, querido Edu. ¡Por completo! Ya ves, un lindo cuento animal, fresco como una lechuga nevada. Renos cerveceros al final (cuando terminé de convencerme de que por nada del mundo eso lo había escrito mi francesa amiga y ni aún así pude atribuirle correctamente la autoría…. hasta que leí el comentario de la propia Anne, estaba de lo más perpleja: QUIÉN ESCRIBIÓ ESTO, POR DIOS?!?!?

    Es un cuento precioso, limpio, increíblemente tierno y juguetón, con el toque político imprescindible, claro, pero no suficiente para quitarle ligereza y ese tintineo cristalino de fondo.

    Love it and love you!

  24. 14/12/2010 14:10

    La Navidad consigue que el niño interior que hay en cada uno de nosotros salga a la luz. Cuando un padre se emociona más con un juguete que el niño yo me quedo sin habla y no puedo añadir nada más.
    Felices Fiestas!

    Me encantó tu cuento navideño!!

  25. 13/12/2010 22:58

    El compromiso del autor, dicho y hecho, para que veas que tus deseos son órdenes.
    Con más tiempo salen mejor, pero no está mal de vez en cuando un reto.

    PD Respecto al relato, sólo puedo decir que creas en ti. La calidad empieza por uno mismo.

    Abraçada

  26. 13/12/2010 22:44

    Genial! dice una niña que soy yo.
    Edu, que bueno eres improvisando y que divertido! Como se te nota el oficio. Me ha encantado la historia contada por un reno. Por si no te lo ha dicho Alex, se te dan muy bien los cuentos.
    Un abrazo,
    PS. hoy he empezado a escribir el relato y aparte de que es un rollo, me está enredando él a mí! Al fin!

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